
Dos cosmoquímicos de la Universidad Estatal de Arizona
(ASU) han hecho las primeras mediciones de agua contenidas en muestras
de la superficie de un asteroide. Las muestras procedían del asteroide
Itokawa y fueron recolectadas por la sonda espacial japonesa Hayabusa.
Los hallazgos del equipo sugieren que los
impactos tempranos en la historia de la Tierra por asteroides similares
podrían haber generado hasta la mitad del agua de los océanos de nuestro
planeta.
"Encontramos que las muestras que examinamos estaban enriquecidas en agua
en comparación con el promedio de los objetos del sistema solar
interno", dice Ziliang Jin, investigador postdoctoral en la Escuela de
Exploración de la Tierra y el Espacio de ASU, y autor principal del
artículo, publicado en ‘Science Advances’.
"Fue un privilegio que la agencia espacial japonesa JAXA estuviera
dispuesta a compartir cinco partículas de Itokawa con un investigador
estadounidense", dice Maitrayee Bose, profesor asistente en la escuela y
coautor del trabajo.
La idea del equipo de buscar agua en las muestras de Itokawa fue una
sorpresa para el proyecto Hayabusa. "Hasta que lo propusimos, nadie
pensó en buscar agua", dice Bose. "Estoy feliz de informar que nuestra
corazonada dio sus frutos".
En dos de las cinco partículas, el equipo identificó el mineral piroxeno. En muestras terrestres, los piroxenos tienen agua en su estructura cristalina.
Bose y Jin sospechaban que las partículas de Itokawa también podían
tener trazas de agua, pero querían saber exactamente cuánta. Itokawa ha
tenido un historial aproximado de calentamiento, impactos múltiples,
choques y fragmentación. Estos elevarían la temperatura de los minerales
y expulsarían el agua.